El fabricante chino de vehículos eléctricos BYD sube en el ranking Fortune Global 500

La industria automotriz de China está en alza. Se espera que sus exportaciones de vehículos eléctricos se dupliquen este año, y el país bien podría arrebatarle a Japón la corona como principal exportador de automóviles del mundo.

La recién publicada lista Fortune Global 500, que clasifica a las empresas de todo el mundo según sus ingresos, también refleja el ascenso de China como potencia automotriz mundial. Un indicador útil es qué empresas han subido más de rango en comparación con el año anterior.

El fabricante chino de vehículos eléctricos BYD, que fue el mayor vendedor mundial de vehículos eléctricos e híbridos enchufables el año pasado, subió 224 puestos en comparación con el año pasado, cuando entró por primera vez en la lista Global 500. Actualmente ocupa el puesto 212. Esa mejora es sólo superada por el proveedor estadounidense de servicios de tecnología de la información TD Synnex, cuyo ranking subió 236 puestos.

La estrategia de integración vertical de BYD está impulsando al fabricante de automóviles muy por delante de sus rivales en términos de capacidad de producción y participación de mercado.

La empresa ha construido una cadena de suministro completa que abarca minas de litio, procesamiento de litio, producción de baterías y una unidad interna de chips de computadora. Incluso está construyendo una operación de envío de automóviles en toda regla para garantizar que pueda transportar sus productos terminados a los mercados de exportación.

La estrategia está dando sus frutos: en julio, BYD rompió su récord mensual de ventas de vehículos eléctricos por tercer mes consecutivo.

Otro actor importante en la industria china de vehículos eléctricos es CATL. El gigante de las baterías entró en la lista Global 500 de Fortune por primera vez este año, lo que refleja la creciente demanda de sus productos en China y en todo el mundo. CATL ocupa actualmente el puesto 292.

La incorporación de CATL al ranking de las 500 principales se debe en parte a trimestres consecutivos de aumento vertiginoso de los ingresos y las ganancias. La semana pasada, CATL informó un aumento del 56% en sus ingresos a 100.000 millones de yuanes (13.900 millones de dólares) y un aumento del 63% en las ganancias.

Mientras tanto, algunas de las empresas que experimentaron las mayores caídas en las clasificaciones reflejan el mal estado del mercado inmobiliario de China. El fabricante de cemento Anhui Conch y el fabricante de acero Beijing Jianlong Heavy Industry cayeron 111 y 102 puestos, respectivamente, hasta los puestos 464 y 465.

No son sólo las ventas de baterías y vehículos eléctricos las que marcan el dominio de la industria china de vehículos eléctricos. Los fabricantes de automóviles extranjeros ahora están recurriendo a la tecnología china de vehículos eléctricos en un intento por impulsar su propia competitividad.

La semana pasada, el fabricante de automóviles alemán Volkswagen invirtió 700 millones de dólares en una participación del 5% en su rival chino Xpeng, y los dos desarrollarán conjuntamente vehículos eléctricos utilizando la tecnología de plataforma de este último. Una plataforma EV es la estructura de capa base del automóvil y puede ahorrar costos y tiempo al usarse en diferentes modelos.

La noticia sigue al reciente anuncio de Audi, filial de Volkswagen, de que está trabajando con el fabricante de automóviles estatal chino SAIC para desarrollar vehículos eléctricos. Según se informa, Audi también está buscando comprar la plataforma EV de SAIC.

Como lo expresó un medio de comunicación chino (enlace en chino), refiriéndose a la alianza Volkswagen-Xpeng: “Volkswagen acaba de pagarle a Xpeng [700 millones de dólares] en concepto de matrícula”.

Podría decirse que el fabricante de automóviles estadounidense Ford está haciendo lo mismo con su asociación de fábrica de baterías con CATL. Es probable que otras compañías automotrices extranjeras sigan su ejemplo.

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